18 Mar La batalla de las “colitas” tensionan los escrutinios
Cada que en Colombia se realizan elecciones y tras el cierre de las urnas a las 4 de la tarde siempre hay que reiterar y explicar que los datos de esa noche, el llamado preconteo, solo es un elemento de información de los resultados, pero sin ninguna validez jurídica.
Y cada cuatro años de elecciones hay que volver a enfatizar que solo son los escrutinios de la votación los encargados de permitir, ya legalmente, la declaración de elección, en el caso de las votaciones del pasado 13 de marzo, de senadores y representantes a la Cámara.
Luego de concluidos los comicios, esa misma noche en todos los municipios colombianos se debe iniciar el proceso de escrutinios, que están a cargo de magistrados, jueces y notarios, pues los registradores municipales y los delegados del Registrador en lo departamental, no pueden fungir como escrutadores, sino prestar un servicio de apoyo. Primero arrancan los escrutinios municipales, luego los departamentales que se van alimentando cada vez que van llegando los datos escrutados de cada municipalidad y en el caso de una elección nacional como la del pasado domingo, se concluye con los escrutinios que corresponden a los del Senado de la República, que se llevan a cabo en Bogotá con base en los resultados escrutados de cada una de las regiones o territorios colombianos.
Escrutinios en Antioquia
En esta región los escrutinios se cumplen, como ha sido una larga tradición, en el teatro de las Torres de Bomboná, sede de las oficinas de la Organización Electoral en este departamento, mientras que el denominado reconteo de la votación de Medellín siempre se lleva a cabo en el Palacio de Exposiciones.
Los escrutinios pueden confirmar, tras ajustes, los votos obtenidos por los candidatos o las organizaciones políticas, ratificar los que salieron electos o producir cambios en ambos casos, sobre todo en lo que en el argot electoral se denominan las “colitas”, que son los últimos candidatos electos por cada lista de partido y que corren riesgo de ser desbancados por compañeros de sus propias planchas que quedaron quemados en el preconteo, pero que en el escrutinio pueden recuperar votos y salir electos.
Esta es la situación que está ocurriendo en el actual proceso escrutador, pero que ha sido seriamente alterado por una escandalosa inconsistencia o desfase entre el preconteo y el reconteo legal, que está dándole al Pacto Histórico tres curules más de Senado al aumentar su votación de la noche del domingo de 2.3 millones a más de 2.7 millones de sufragantes, con lo cual está conquistando 19 curules.
Esas tres curules las están perdiendo de a una el Partido Conservador, el Centro Democrático y la coalición Alianza Verde Centro Esperanza, afectando en este último caso al antioqueño León Fredy Muñoz, quien irónicamente está perdiendo su escaño con el petrismo al que respalda dentro de los verdes y quien es hermano de la líder más caracterizada que por muchos años ha tenido Gustavo Petro en Antioquia, como ha sido la socióloga Teresa Muñoz.
Así las cosas, por esa situación Antioquia, que la noche de domingo tenía quince senadores, quedaría con catorce, aunque restan por realizarse los escrutinios nacionales para el Senado en Bogotá, que por lo que está ocurriendo serán muy calientes, tensionantes y de alto riesgo.
Todo se debe a una increíble e inaudita falla en el diseño del formulario E14, donde los jurados consignan la votación de partido por mesa, y en los que no apareció la hoja correspondiente al Pacto Histórico, cuyos sabuesos, sospechando que algo raro estaba sucediendo, pusieron el grito en el cielo e hicieron sonar las alarmas que en 29.000 mesas electorales de las 113.000 que funcionaron en Colombia, no apareció un solo voto en el preconteo, pero que ahora están apareciendo en el escrutinio más de 390.000, pues la votación de esa coalición petrista figuraba anexa al formulario de la votación del Partido de la U.
Con razón a muchos expertos en el tema electoral nunca les ha generado confianza el actual registrador Alexander Vega, para que precisamente bajo su mando se presente semejante chambonada y omisión, que está originado airadas protestas de los partidos afectados por culpa de los errores de la Organización Electoral.
Es el caso del Sector Democrático, CD, que mediante un duro pronunciamiento escrito calificó como inaceptable la inexactitud de la Registraduría, que está provocando drásticos cambios en la conformación del Senado, donde un partido alternativo de tendencia contestaria de izquierda, con la contribución de algunos políticos de partidos tradicionales, se está convirtiendo por primera vez en la historia político – electoral colombiana en la primera fuerza del Senado, con la mayor votación para una organización partidista, superando incluso al uribismo en los mejores momentos de su líder y expresidente reelegido.
Antioquia y Medellín
Entre tanto, por Antioquia avanzan los escrutinios departamentales y de su capital Medellín.
En torno a esta ciudad, hasta ya entrada la noche del viernes, el reporte oficial era que se habían escrutado 64 comisiones de las 72 que se constituyeron y el proceso de reconteo avanzaba sin mayores traumatismos, al tiempo que Medellín tenía previsto terminar al mediodía de este sábado 19 de marzo.
Por su parte, en la tarde del viernes el abogado electoral Martín Cardona, quien hace presencia en los escrutinios seccionales, reportó que había sido escrutada la votación de 64 municipios.
Para el caso de Antioquia la batalla más sonora entre las “colitas” es la que se registra entre el hasta ahora electo representante a la Cámara, el verde Camilo Londoño y la envigadeña Ana Carolina Arboleda, quien sigue chupando rueda y respirando en la nuca del exdeportista de alto rendimiento, quien se defiende con todo.
Entre tanto, la exconcejala Luz María Múnera aún no pierde la esperanza de conseguir para el Pacto Histórico la tercera curul de Cámara y se le ve de un lado para otro buscando votos a lo loco a ver si de pronto le arrebata la quinta curul al Centro Democrático, lo que no está fácil.
Y al terminar la jornada escrutadora del vienes, dos antioqueños no lograban entrar en el selecto grupo de los cien senadores de la circunscripción nacional de Senado.
El liberal Iván Agudelo seguía penando sin poder entrar, mientras que Gilberto Tobón, pese a su altísimo guarismo electoral, no lograba salir electo, porque su partido Fuerza Ciudadana, con casi 422.000 sufragios, no alcanzaba el umbral de 498.000 votos producto de una votación válida de 16.6 millones de votos.
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