Por gestiones adelantadas no por la actual rectoría fajardista, sino durante la pasada rectoría del abogado liberal Néstor Hincapié Vargas, la Universidad de Medellín se acaba de reivindicar de algunos escándalos mediáticos bogotanos y vuelve a colocarse como uno de los más importantes centros de formación privada profesional del país.

La famosa U. de M. acaba de ser acreditada institucionalmente por su calidad académica, decisión que hace 20 meses había adoptado el Ministerio de Educación Nacional, pero que extrañamente apenas ahora notifica.

En efecto, el pasado viernes 30 de abril la Universidad de Medellín fue notificada mediante la resolución 007470 del Ministerio de Educación Nacional, sobre la renovación de su acreditación institucional por seis años, en un proceso que fue solicitado el 17 de diciembre de 2018, por el entonces rector Néstor Hincapié y evaluado por un amplio grupo de pares académicos del Consejo Nacional de Acreditación, durante el siguiente año.

Según indica la resolución, en la sesión ordinaria del CNA del 30 de agosto de 2019, este organismo dio concepto favorable al proceso adelantado en meses anteriores, debido a que la Universidad de Medellín mantenía los estándares de calidad suficientes para que, de acuerdo con las normas que rigen la materia, se reconociera públicamente a través de un acto formal.

Sin embargo, la demora en la entrega de este reconocimiento de alta calidad por parte del Ministerio de Educación Nacional origina muchos interrogantes y especulaciones.

No obstante, trascendió que esa tardanza se dio, al parecer, a un trámite administrativo normal que, 20 meses después de haberse elaborado el documento de favorabilidad al proceso, se confirmó mediante la resolución expedida por la responsable de esta Cartera, María Victoria Angulo González.