23 Ene ¿Contraloría de bolsillo en Rionegro?

Las fuertes paradojas, ironías y contrasentidos de los uribistas de Rionegro. Mientras su máximo jefe nacional el expresidente Álvaro Uribe Vélez es un tenaz adversario y hostil del control fiscal territorial y cuando fue senador radicó un proyecto para eliminar los contralores departamentales y municipales, sus súbditos y desobedientes seguidores rionegreros, lo que no parece, no le paran bolas y por el contrario crean una nueva, costosa, burocrática y politizada Contraloría en Rionegro, en el peor momento económico de esta histórica municipalidad, incrementando sus problemas financieros.

Así lo denunciaron los concejales opositores Fernando Valencia y Leidy Johana Baena, quienes no sólo votaron negativo el proyecto de acuerdo que le dio vida jurídica a ese entuerto político, sino que también votaron en contra de la elección el pasado viernes 22 de enero de la nueva contralora Sandra Landinez Cárdenas, que salió de una terna que también integraban Carlos Andrés Asprilla Córdoba y Leonardo Aristizábal Zuluaga, tras la convocatoria pública que se llevó a cabo.

En concepto de estos dos concejales, ética y profesionalmente Landinez Cárdenas no debe ser la persona que ejerza el control fiscal en Rionegro, pues denunciaron que fue contratista y asesoró al municipio hasta diciembre del 2020 y su esposo ha sido también contratista del ente municipal.

También hicieron ver que la creación y elección de un contralor es un hecho muy negativo por la delicada crisis económica de Rionegro. Recordaron que la Contraloría Departamental y el Departamento Nacional de Planeación han alertado una y otra vez del alto riesgo de este municipio por su alto endeudamiento.

Por tal motivo exteriorizaron una enorme preocupación porque la creación de ese ente de control fiscal tendrá efectos muy negativos para las finanzas municipales, pues tiene un costo aproximado de 4.000 millones de pesos, cuando el delicado momento requiere de austeridad y de acciones para conservar el recurso público.

La oposición política siempre ha sostenido que la creación de la Contraloría en Rionegro se debe a un revanchismo contra la Contraloría Departamental por sus auditorías que llevaron a develar la profunda crisis económica de Rionegro y por las investigaciones fiscales contra la administración pasada, lo que la llevan a preguntar ¿si la nueva contraloría será de bolsillo?

Igualmente, las comisiones de auditores de la Contraloría General de Antioquia siempre se quejaron de la forma desconsiderada como fueron tratados por la Administración al momento de realizar su labor de control fiscal en Rionegro.