15 Sep “Las contralorías territoriales estamos trabajando en la prevención contra la corrupción”

Enedith del Carmen González Hernández (FOTO) lleva ocho meses al frente de la Contraloría General Antioquia y no le gusta ser protagonista ante los medios de información, sino dedicarse a su trabajo en favor de la entidad, sobre todo ahora que las contralorías nuevamente están en la mira de los que las quieren desaparecer.

Pese a su bajo perfil ante la prensa de Antioquia, la muy serena funcionaria fiscal accedió a dar su primera entrevista y con argumentos demuestra que mediante un trabajo de prevención están trabajando contra la corrupción y la protección del patrimonio público.

Contralora comencemos por la persona, ¿cuál es su recorrido en el control fiscal, porque usted no es una persona muy conocida, y que le permitió llegar a ser la contralora General de Antioquia?

Soy de San Pedro de Urabá, trabajé allí en control interno, como secretaria de Gobierno y después Dios me dio la oportunidad de llegar a Medellín y precisamente a mi casa que ha sido la Contraloría de Antioquia como contralora auxiliar en el área de responsabilidad fiscal alrededor casi de ocho años.

¿Qué contralores le tocaron?

Con los contralores Luz Helena Arango y Sergio Zuluaga y durante su periodo pasé a la subdirección administrativa y así conocí la parte misional y administrativa de la entidad.

Luego me presenté a la convocatoria del concurso para la Contraloría de Itagüí y tuve la fortuna de quedar como contralora de esta ciudad en el periodo atípico de dos años por la transición del acto legislativo 04 de 2019 sobre el control fiscal en el país.

Y si quiere le echa una buscadita y verá que quedamos como la mejor contraloría en el ámbito nacional porque en ese mismo acto legislativo y con el decreto 403 que fue la reforma al control fiscal, se creó la certificación a las contralorías por parte de la Auditoría General de la República y también en medio de la pandemia del covid. 

A propósito, ¿se manejan bien los sujetos de control en Itagüí?, ¿qué tal está siendo conducida esta ciudad?

Sabe que sí, independiente de todo fue un trabajo mancomunado.

El sujeto más grande que nos tocaba vigilar era el propio Municipio de Itagüí y digamos que han hecho una buena administración y, además, eran muy juiciosos en las recomendaciones.

Y en general nos fue bien en el control fiscal en esta ciudad y la Auditoría General de la República sacó el consolidado y quedó la Contraloría de Itagüí en el primer lugar.

¿Entonces, termina su labor de dos años de contralora de Itagüí y decide concursar el año pasado para dirigir, nada menos, a la Contraloría de Antioquia, su casa como la usted la acaba de denominar, en concursos muy pero muy criticados, demandados, con muchos reparos?

Participé y fue duro, fue un proceso duro porque hay cuestionamientos, pero hay que decir que el concurso para la Contraloría de Antioquia lo hizo la Universidad Nacional, ampliamente reconocida nacional e internacionalmente.

Si bien se tuvieron algunos contratiempos, considero que fue uno de los concursos que mejor salió, que se llevó a cabo legalmente y se logró elegir contralor en diciembre del 2021 y comenzar la gestión en enero pasado, porque si miramos aún hay municipios que no han podido tener contralor en propiedad o están encargados por los procesos de demandas, tutelas. etc.

¿Usted se ganó el concurso?

Yo me lo gané y me posesioné.

Ahora, ¿cuál es su criterio, su estilo, su pensamiento sobre el control fiscal? ¿Qué vino a hacer usted en la Contraloría de Antioquia, qué quiere hacer?

Primero hay que decir que por el covid todo fue muy difícil y no se pudo llegar a los 120 municipios que vigilamos.

A qué le hemos apuntado en estos 8 meses de labores, a un control fiscal preventivo.

Es respetable que otras personas tengan una posición diferente, pero yo creo que hay que mirar un punto de vista preventivo y con la presencia en estos 8 meses de los funcionarios de la auditoría en cada una de las subregiones con nuestras competencias y que sientan la presencia de la Contraloría, no a perseguir, sino a vigilar que es nuestra función, para prevenir y decirles qué procesos deben mejorar para que el otro año, cuando volvamos a mandar auditores, no encontremos esos hallazgos tan numerosos o con recursos tan altos, se trata de prevenir y que hagan bien las cosas.

Adicionalmente se vienen el año entrante las elecciones locales y esto lleva a que los alcaldes les den por correr ante tantas dificultades y uno trata de entenderlo, pero es precisamente eso, hacer entender a nuestros sujetos, a los alcaldes o entidades descentralizadas, que en el último año hagan las cosas bien.

¿Comparte que las elecciones y los periodos de los contralores ya no coincidan con las elecciones generales territoriales?

Total, y lo podemos comparar con el caso de los controles internos, que también se separaron. Hay más transparencia, porque vamos a trabajar en un periodo intermedio y no quedamos sujetos a esos muy politizados procesos electorales y políticos de alcaldes y gobernadores.

Muy bien contralora, ¿qué hay entonces con la participación ciudadana en el control fiscal y con la labor de las veedurías como apoyo a ustedes? ¿Cuál es su posición sobre el control social porque aquí hay una funcionaria que no le gusta y es un mandato legal?

A mí sí me gusta el control social y en eso quiero ser muy sincera.

El presupuesto de la Contraloría de Antioquia se ha reducido mucho y lo que más nos da duro son los viáticos para mandar a los funcionarios a los municipios, por lo cual debemos trabajar es con las veedurías, con la ciudadanía.

Yo le hecho un seguimiento a la atención al ciudadano y a la oficina de Control Social, a las dos dependencias, y la mayoría o algunas de las denuncias más relevantes e importantes en la Contraloría son de veedores o de la ciudadanía.

La ciudadanía y los veedores son los que realmente saben o conocen cómo se están ejecutando los presupuestos en sus municipios. Por eso dentro del plan estratégico de la entidad quedó plasmado el fortalecimiento de las veedurías y de la ciudadanía para que trabajen de la mano con nosotros como contraloría.

De lo contrario no vamos a hacer capaces y esa es la realidad.

¿Entonces, que quede muy claro, incluso a la funcionaria que no le gusta, que el control social será crucial en su gestión?

Hemos venido trabajando en las 9 subregiones mediante encuentros porque realmente no nos alcanza para llegar a todos los municipios. Y esa tarea la ha venido haciendo control social e incluso con Comunicaciones, que organizan todo lo que es la avanzada con los veedores, con la comunidad, además de solicitarle el apoyo a los alcaldes para las convocatorias.

Y hemos tenido muy buenos resultados porque de una vez logramos capacitar a los veedores y a la comunidad e interactuar con ellos.

Los veedores lo único que te piden en que les ayudemos con las capacitaciones y es con algo que le podemos cumplir.

Y yo le he dicho a los funcionarios que soy de la concepción que lo bueno se sigue y lo malo se mejora. Realmente se ha venido haciendo un trabajo desde las pasadas administraciones con los veedores, se las ha dado un buen reconocimiento, se les dio un buen apoyo, se logró mancomunar el trabajo entre la contraloría y esa población de veedores y la misma comunidad y ¿por qué no seguirlo?

Entonces la funcionaria que no gusta de los veedores, que no ponga tan innecesarios problemas.

Pero pasemos a otros tópicos. Le acabo de escuchar sobre los problemas presupuestales de la entidad, ¿qué está pasando, el cambio de modelo de la FLA golpea los recursos de la Contraloría?

Totalmente, se reducen demasiados los recursos. Este año me encontré con la obligación normativa de devolver 3.800 millones, de pronto a uno le molesta al inicio, pero verificando había que hacerlo porque ya teníamos el tope de los recursos de la Contraloría, entonces no podíamos utilizaros porque no cumpliríamos la Ley 617. No fue mala gestión, el tema de la FLA nos golpeó, a la muestra está que nos llegó menos recursos: 1.800 millones.

El hecho del cambio de modelo de la FLA si genera una reducción en nuestros ingresos e igualmente con el caso de Hidroituango porque no está funcionando. De eso depende un poco más la estabilidad de los funcionarios de la Contraloría de Antioquia, se espera que en noviembre empiecen a funcionar turbinas y si eso es así, entraríamos nosotros a vigilar, porque hoy estamos sufriendo por ese tema para los viáticos, para mandar a los funcionarios a los municipios, lo que se reduce totalmente.

¿El control fiscal sobre Hidroituango lo tiene hoy la Contraloría General de la República?

Perdimos por control preferente y la norma lo permite la competencia sobre esta obra y también sobre el Central Park y sobre la vía a Támesis.

Pero como se presentaron dos denuncias por nuevos recursos que se están invirtiendo en esas dos obras, se le ofició a la Contraloría General de la República, CGR, para que tuviera conocimiento y ellos nos manifestaron que como son hechos y recursos nuevos y que la Contraloría General de Antioquia tiene que tomar el control.

Entonces decretamos una URI (Unidad de Reacción Inmediata) en el caso de la vía a Támesis y para el Central Park que se instala este lunes, a las 7 a.m., en Indeportes.

Y también la CGR nos pidió la competencia por la construcción de la Ciclo Ruta en el Oriente de Antioquia, por una serie de denuncias de diputados, ya vamos muy adelante en las investigaciones y por eso tiene reserva, ya se pasó al proceso de responsabilidad fiscal y se decretó auto de apertura.

Ahí vamos tratando día a día que las denuncias que nos lleguen o los hallazgos que se encuentren en las auditorías no se las lleve la CGR.

¿En lo que va de su periodo cómo marcha la batalla contra la corrupción en Antioquia?

Presencia en los municipios y trabajo con los veedores y la comunidad.

Dependiendo de la denuncia que se tome en el término de seis meses tenemos que tener resultados.

Eso nos pasó con el tema de la carne de caballo en La Ceja que se le estaba suministrando a los niños. De manera inmediata se conformó un equipo interdisciplinario de la oficina del delegado y de la auditoría, se tomó como denuncia pública y se mandó a dicho municipio.

¿Contralora eso en la parte externa, pero ojalá no más escándalos internos en la entidad que afecten su imagen y credibilidad?

La Contraloría tiene 320 funcionarios hasta el momento y les pedí a todos desde el primer momento que llegué respeto y en ese sentido considero que por el hecho de ser directivo no le pueden faltar al respeto a los funcionarios que son los que hacen el trabajo día a día de control fiscal desde el profesional universitario hasta el auxiliar. Por qué tenemos que tratarlos mal o pasar por encima de ellos y es una de las líneas que quedó en el plan estratégico en el aspecto del recurso humano.

Aquí hay funcionarios demasiado inteligentes, demasiado juiciosos, entregados y que sufrieron por los escándalos que se presentaron.

Y les he dicho que el que cometa un acto de corrupción se va y hay que ser sinceros las contralorías están en la mira.

¿De eso quería preguntarle? ¿Hay nuevos peligros sobre la existencia de las contralorías?

Acaban de presentar otro proyecto de ley para desaparecerlas.

¿Entiendo que hubo reunión de los contralores territoriales frente a esa nueva amenaza, qué piensan hacer?

Si se mira el decreto 403 y el acto legislativo se quedó que se debería regular por parte del contralor General de la República la financiación de las contralorías.

Las Contralorías Departamentales tenemos que ser realista por el déficit presupuestal y vamos a llegar a un punto en el que no vamos a poder cumplir y tendremos que sacrificar la nómina, sacar funcionarios porque el presupuesto de la Contraloría se va más que todo en nómina.

La junta de la Asociación Nacional de Contralores ha sido muy juiciosa este año, ha venido trabajando de la mano del gobierno. Actualmente se han buscado espacios para acercarnos más al gobierno y en esto nos ha ayudado mucho la Auditoría General de la República, cuya titular es una defensora de las contralorías, si hay que cambiar pues cambiamos.

Y yo considero que las contralorías territoriales hemos hecho un buen trabajo y lo hemos hecho bien por nuestras tareas preventivas sobre los bienes públicos y no tanto por lo que se recupera que también es mucho.

Si se mira bien en la Procuraduría y en la Fiscalía quién ha hecho los traslados de los hallazgos disciplinarios y fiscales, hemos sido las contralorías y por qué dicen que no hemos hecho nuestro trabajo, lo que es injusto.

Se está tratando de llegar al Gobierno Nacional para explicarle el trabajo que venimos haciendo y de la prevención que estamos adelantando con los sujetos de control para que ejecuten bien los recursos, para que hagan bien las obras, que apliquen la normatividad y para eso hay aquí funcionarios trabajando día y noche en la prevención contra la corrupción. Necesitamos es un poco más de apoyo.