15 Abr Guillermo Montoya según Guillermo Mejía

Profunda conmiseración y tristeza en los círculos académicos y jurídicos sigue originando el fallecimiento por covid del renombrado profesor universitario Guillermo Montoya Pérez.

Durante su existencia como estudiante y en desarrollo de su brillante trayectoria en la docencia y profesional fue una persona muy conocida por nuestro asesor y analista jurídico, electoral, religioso, político y futbolero verde, Guillermo Mejía Mejía, quien le tributó el siguiente homenaje escrito a su amigo y colega:

“El lamentable fallecimiento de Guillermo Montoya Pérez nos hace retroceder en el tiempo para recordar a los juristas completos que son muy difíciles de encontrar dada la complejidad que ha adquirido el Derecho en nuestros días.

“Guillermo era un abogado completo. Aunque su especialidad era el derecho civil y dentro de este el derecho de familia, uno pudiera decir que de una conversación con él se salía convencido de su inmensa capacidad jurídica para abarcar el inmenso universo de esta ciencia. Además de su vocación por la enseñanza en las distintas universidades de Antioquia, principalmente en Eafit, fue un autor prolífico en temas de derecho comparado pues fue el alma de varios congresos internacionales sobre derecho privado de los cuales salieron valiosas obras como “Los Contratos Gratuitos” y el “Divorcio en el Derecho Iberoamericano”, fue, además, columnista del periódico “Ámbito Jurídico” y conjuez de la Sala Civil de la Corte Suprema de Justicia.

Aunque no en edad pero sí en conocimientos se puede afirmar que Guillermo Montoya es de la generación de Darío Echandía, Jairo Duque Pérez, Manuel Gaona Cruz, Mario Aramburo Restrepo, Humberto de la Calle, Carlos Gaviria Díaz, Lucrecio Jaramillo Vélez y Fernando Hinestroza Forero, entre otros, abogados universales, conciencias jurídicas, juristas con los cuales se puede estar en desacuerdo pero nunca dejan de ser faros luminosos que orientan a las nuevas generaciones, que crean doctrina y que enriquecen la jurisprudencia de las altas cortes. Paz en su tumba.